Geometría sagrada: El cubo de metratrón 

La geometría sagrada se encuentra en todas partes, en todos los elementos de la naturaleza (montañas, árboles, flores, mar, nubes, etc.), está presente en nuestro cuerpo (estructura física, sangre, ADN) y también está más allá de nuestro planeta—en el sistema solar y el universo. La geometría sagrada está relacionada con la creación.

Uno de los principios básicos de la geometría sagrada es “como es arriba, es abajo” que evidencia que todo lo que está manifiesto en el pequeño mundo microscópico tiene su reflejo en el macrocosmos.

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Recrea el espíritu en las formas, tiene orden, armonía, energía y vibración. Nos interconecta y da vida—garantiza la evolución del ser. Es un lenguaje de luz y una poderosa herramienta que debe ser utilizada con responsabilidad y precaución porque dependiendo de cómo se utilice puede resultar muy beneficiosa para nuestra evolución personal o bastante peligrosa si se emplea con fines oscuros o egoístas.

¿Quién es Metatrón?

Metatrón es un arcángel que se relaciona con la presencia divina en la Tierra. Se dice que es el patrón de los niños ya que los guía en su evolución, crecimiento y aprendizaje. También tiene acceso a la sabiduría ancestral, es por ello por lo que se le considera como el guardián de los registros akashicos. Gracias a esto, ayuda al ser humano a perfeccionar su alma, a encontrar su misión en esta vida y le guía en su proceso de evolución e iluminación. Es el arcángel que está custodiando a la humanidad y al cosmos en estos momentos.

El Cubo de Metatrón: el más poderoso de la geometría sagrada

El Cubo de Metatrón es un desbloqueador que abre los caminos y que puede ayudarnos a elevar nuestra vibración. Lleva su nombre en honor al Arcángel Metatrón y es la representación de su alma. En el interior del Cubo de Metatrón se reflejan los 5 sólidos Platónicos, el Árbol de la Vida, también está presente la espiral áurea (siguiendo la frecuencia o sucesión Fibonacci) y el merkaba. El cubo de Metatrón contiene la fórmula secreta de las más sagrada de todas las geometrías. Es la llave, el caleidoscopio de la creación.

El Cubo de Metatrón es realmente muy poderoso, tanto así que debemos utilizarlo con precaución. La primera pregunta que debemos hacernos antes de utilizarlo es ¿Realmente sé que es lo que deseo? Si no estamos completamente seguros de qué es lo que deseamos es mejor abstenerse de emplearlo ya que todo lo que proyectemos en el Cubo de Metatrón se fractaliza en el universo para que posteriormente pueda materializarse en nuestra realidad física.

Es importante trabajarlo de manera individual, en un espacio donde te encuentres en paz, armonía y privacidad. Se debe utilizar en momentos en los que nos sintamos tranquilos (evitar trabajar con el cubo de Metatrón cuando nos sintamos preocupados, estresados, molestos, etc.) Y sobre todo, es necesario que al utilizarlo nos hagamos responsables sobre nosotros mismo y nuestras vidas, por eso es tan importante saber qué es lo que quieres realmente.

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También se le reconoce como un glifo sagrado que se puede dibujar alrededor de un objeto o persona para protegerla de las energías bajas, obscuras, densas, toxicas o negativas en cualquier forma, de manera que funcione como un poderoso escudo.

Se desaconseja colocar el Cubo de Metatrón en espacios públicos donde transite o convivan muchas personas (oficinas, tiendas, espacios compartidos del hogar, etc.) Es mejor que cada persona tenga su propio Cubo de Metatrón personal para evitar cruces de energías.

 

Imágen por cortesía de Mohamed Sobeha

El Cubo de Metatrón y la activación del merkaba

Aunque los movimientos oculares y los mudras sirven para activar la merkaba (el campo de energía alrededor de nuestro cuerpo físico), la meditación es la mejor manera de activar esta energía.

El siguientes es un ejercicio de activación que debe realizarse observando atentamente el Cubo de Metatrón, el cuál nos permite alcanzar inspiración y materializar nuestros deseos, de allí se advierte, una vez más, que es muy importante estar seguros de lo que deseamos:

1. Siéntate cómodamente en un lugar tranquilo y coloca tus manos en posición de rezar.
2. Focaliza tu atención en el centro del Cubo Metatrón.
3. Respira lenta y profundamente.
4. Visualiza las dos pirámides entrelazadas que están en el cubo (Una con el vértice hacia arriba y la otra invertida)
5. Imagina que las dos pirámides “salen” del cubo y se ubican en tu cuerpo, siendo el centro tu corazón.
6. A medida que respiras imagina que ambas pirámides comienzan a girar como si fuesen una estrella.
7. Visualiza una luz que sale de tu corazón y baña todo tu cuerpo. Continúa respirando suave y profundamente.
8. Agradece la activación de tu merkaba. Puedes pedir sanación, guía y orientación para tu mayor evolución y bienestar.

Existen otros métodos más complejos de activación del merkaba, pero la práctica de esta sencilla meditación ofrece muy buenos resultados.

 

-Por Lolimar Araujo Morales          

Especialista en Programación Neurolingüística y practicante de Reiki con más de 15 años de experiencia.