Los sueños astrales se pueden utilizar tanto para aprender como para sanarnos a nosotros mismos. “Sueño Astral” es un término usado para describir el estado en el que estamos tanto conscientes pero también participando en nuestros sueños.
Un ejemplo de esto es lo que llamamos “viajes astrales”, donde el soñador está a la vez consciente de ir a diferentes destinos durante su tiempo de sueño y de lo que experimenta a lo largo del camino. La verdadera diversión comienza cuando se aprende cómo grabar y reproducir estas experiencias en una fecha posterior.
Muchas culturas indígenas de todo el mundo creen que el mundo existe como lo soñamos. Esto implica que al soñar pensamientos positivos, o visiones de lo que nos gustaría ver, podemos manifestarlos a la realidad.
Aunque puede ser un poco más complicado que simplemente tener pensamientos hermosos, tal parece que esta creencia tiene cierto mérito y que verdaderamente ayuda el recordar tus sueños astrales. Seamos realistas, muchas personas que han logrado extraordinarias hazañas en sus vidas han dicho: “Yo tengo un sueño”, mucho antes de que el sueño se haya hecho realidad.
Así que, ¿qué es lo que tienes que hacer para empezar a tener sueños astrales? Los sueños generalmente están hechos de emociones que nuestra mente subconsciente disfraza para que los podamos reconocer visualmente porque no tenemos palabras para explicarlos. Al comprender que se trata de emociones visualizadas, empezamos a identificar la causa de nuestra alegría y ansiedad dentro de nuestros sueños. Este es el siguiente paso para hacer que tus sueños trabajen para ti. Al deshacerte de este equipaje innecesario, liberas tu mente para después poderte curarte.
Mientras soñamos, la mente utiliza filtros para hacer lo siguiente. Los filtros bloquean ciertos pensamientos conscientes, mientras dejan que los viejos recuerdos se combinen con nuevas emociones, lo que provoca paisajes poco claros. Al entender el significado del sueño a través de las emociones, puedes lograr darle una nueva claridad a tu vida.
Hay una técnica sencilla y antigua para iniciar sueños astrales. En primer lugar, crea un icono, una imagen, o coloca una estatua de lo que quieres que aparezca en tus sueños en tu dormitorio. A continuación, concéntrate en esta representación cada noche hasta que tal comience a aparecer en tus sueños. El tercer paso es aprender a llevarte ese objeto que deseas contigo a tus viajes astrales.
La clave para viajar astralmente es abrirte y dejar que tu objeto –ya sea talismán, amuleto,hada madrina, espíritu animal, o ángel de la guarda– te guíe por el terreno desconocido de los sueños. Un buen momento para practicar tener viajes astrales es justo antes de quedarse dormido o justo antes de despertar. A medida que derivas dentro y fuera del sueño, imagina que estas volando, y a medida que regresas de tu sueño puede que de hecho todavía te encuentres volando. Mantente alerta a tu guía y puede que de pronto te encuentres en camino a lugares que ni siquiera creíste poder imaginarte.
El truco para recordar tus sueños astrales es no centrarte en una sola cosa. En cambio, analiza el paisaje de ensueño completo, recogiendo detalles que llamen tu atención, al igual que lo harías con una cámara de video. Al no concentrarte demasiado en recordar lo que puede ser demasiado fantástico de explicar con palabras, no bloquearás la posterior reproducción de las imágenes.
Un par de días más tarde, no más de esto o puede que se te olvide, encuentra un lugar en el que puedas relajarte y tratar de reproducir el vídeo grabado previamente en tu mente. Puede sorprenderte lo mucho que puedes recordar al usar esta técnica, y lo mucho que te puede ayudar el recordar tus sueños.