Este mes de abril, tres planetas inician su retroceso. Mercurio estará ya directo desde el 28 de marzo, pero planetas más grandes —Júpiter, Plutón y Saturno— se irán a dormir.
El primero en comenzar su retroceso es Júpiter, retrocediendo desde el 10 de abril hasta el 11 de agosto. Júpiter en Sagitario prometía mucho, pues es el benefactor en el signo que rige; sin embargo, este tránsito ha estado marcado por su cuadratura con Neptuno en Piscis… y ahora por su retroceso. Si estabas pensando en pedir alguna beca o estabas haciendo planes para ir al extranjero, o sencillamente, para lograr la libertad que necesitas, aprovecha estos últimos días antes del inicio de su retroceso.
El retroceso no significa que los asuntos de Júpiter tengan que salir mal o que vayas a tener mala suerte, solo es que puede que durante un tiempo no recibas noticias sobre cómo van los trámites relacionados a ese trámite o viaje… La parte positiva es que pueden regresar oportunidades del pasado, especialmente que vuelvas a comunicarte con personas del ámbito universitario o que tus maestros u estas personas pudieran traer muy buenas noticias para el futuro. Aunque es casi seguro que aún no puedas llevar a cabo tales planes, es muy posible que se desarrollen más adelante.
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Los siguientes en retroceder van a ser Plutón y Saturno, el 24 y el 30 de abril respectivamente. Cuando Saturno y Plutón se van a descansar, realmente es un respiro para la mayoría. Estos dos planetas en Capricornio nos están mostrando lo difícil que pueden llegar a ser las cosas cuando tenemos pocos recursos y muchos límites. Al retroceder, dejan planteado cuál es el reto a resolver y, aunque no lo parezca, tienes todas las herramientas para salir con éxito. Una vez que arranquen directos en septiembre y octubre será momento de comprobar si has pasado la prueba.
Como todos los meses, en abril tenemos dos eventos lunares importantes. El primero es la luna nueva, que será el día 5 de abril en Aries. La luna nueva nos da la oportunidad de comenzar una etapa de reinvención en nuestra vida y también de superación, de liberarnos de ataduras del pasado y reafirmar la identidad. Es un punto del año en el cual preguntarnos si nos gusta quiénes somos, si nos parece aceptable la descripción que podemos dar de nosotros mismos en este momento. Los propósitos de esta luna nueva deben orientarse a ser la mejor versión de nosotros mismos.
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Pocos días antes de la luna nueva, el día 3 de abril, el asteroide Vesta entra a Aries. Vesta representa el fuego que tenemos dentro de nosotros, es la capacidad que tenemos las personas —y en especial las mujeres— para sanar con la energía de la luna. Su paso por Aries es muy significativo ya que es un signo en el que Vesta está cómoda, dándonos la oportunidad de luchar por nuestros sueños, por convertirnos en ese agente sanador que podemos llegar a ser aunque hasta ahora no lo hayamos notado.
El segundo evento lunar es la luna llena que tendrá lugar el día 19 de abril. Se trata de la segunda luna llena en Libra de este año. Es un final en el sector de tu carta regido por Libra. La parte Libra de la carta de cada uno es nuestra capacidad de conciliar y ser tolerantes, especialmente dentro de nuestras relaciones. Esta luna llena significa el final de una relación o bien el final de un contrato o acuerdo. Incluso en las relaciones personales puede ser el final de un acuerdo no escrito pero que determina la forma en que te relacionas con alguien. Son las expectativas, basadas en lo que se ha hecho siempre, pero que es probable que ahora alguien quiera cambiar.
El día 17 de abril, dos días antes de la luna llena, Mercurio —ya directo— entra a Aries. A su vez, Marte estará en Géminis. Así que Mercurio y Marte van a estar en recepción mutua, lo que significa que ambos trabajan por un mismo objetivo. Mercurio en Aries significa pensar en uno mismo y Marte en Géminis implica querer ser libre y necesitar estímulo intelectual. Es posible que, dado el evento lunar y esta combinación, para esas fechas, muchas personas estén terminando sus relaciones o al menos buscando ser más libres dentro de ellas. Por ejemplo, si hay compromisos o situaciones que no te apetece llevar a cabo pero que sientes que lo tienes que hacer por tu pareja, es bastante probable que para esas fechas decidas no hacerlo.
En resumen, este es un buen mes para tener paciencia y no agobiarnos en las relaciones. Es importante saber comunicar lo que cada uno necesita y no enfadarnos porque la otra persona asuma que vamos a hacer lo que siempre hemos hecho. Para nosotros puede ser evidente que estamos cambiando, pero puede que no lo sea tan evidente para ellos.
Averigua cómo te van a afectar estos tránsitos leyendo tu horóscopo mensual para el mes de abril.
—Por Irene CanoIrene Cano es una astróloga profesional viviendo en la ciudad de Sevilla, España.